Había una vez un niño que se llamaba Alex, era muy delicado a todo. Un día su madre le dijo que si quería comer algo . El dijo que nó. Entonces su mamá le dijo que le llamaría el niño delicado. El niño le dijo que no le llamase así. La mamá le respondió que para eso, tendría que comer algo; pero el niño le dijo que lo haría por la noche. Llegó la noche y el niño otra vez no quería comer nada de nada. -¿Para qué me has dicho eso entonces?- preguntó la mamá. -Porque quería engañarte. Pero ya no voy a decir más mentiras. Pero al día siguiente no quería comer nada, ni al otro, ni al otro y muchos más. Hasta que su madre le dijo que se fuera a vivir a otra casa. Alex se mudó a la casa de su amiga Ana. Ana lo vió con mala cara y le preguntó si estaba triste. Alex le dijo que sí, que echaba de menos a su mamá. Ana le dijo que volviese a su casa. Alex dijo que nó al principicio, pero al final volvió con su madre que le dijo que estaba muy contenta de que hubiese vuelto. Al día siguiente, Alex, que también estaba muy contento de haber vuelto, comió mucho y todos estuvieron contentos. Y colorín colorado hoy se ha acabado.
Autora: Lucía
La mariposa y la abeja (13-4-12)
Erase una vez una mariposa que estaba saltando por las flores y un día en una flor había una abeja y quería picarle. Entonces la mariposa le dijo que si quería ser su amiga, la abeja le dijo que sí y se hicerion amigas y todos los días jugaban posándose de flor en flor. Se divertian mucho las dos juntas.
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